Península Valdés

Hace tiempo que planeo mentalmente un viaje a la Península de Valdés. En verano, las ballenas se pasan una buena temporada allá y es un buen sitio donde verlas. Las ballenas, ballenas. Osea las ballenas grandes.
Es un viaje largamente acariciado. Y mentalmente. Y es que los viajes mentales tienen sus ventajas: son más baratos, nunca te dan chascos, lo que te esperabas es lo que es, y siempre puedes volver a ese paisaje mental para volver a dibujarlo con más o menos precisión.
Así pues, hace poco decidí añadir una nueva herramienta a mi viaje mental: el Google Earth.
Confieso que me chifla, sobre todo cuando escribo una ciudad y la Tierra empieza a girar hasta encontrar su punto y acercar el zoom. Es un poquito cosa de dioses. Bueno, a lo que iba, que con el Google Earth me he dedicado a otear la Península de Valdés un buen rato, a ver si aparecía una cola de ballena por allá. Por ahora nada, ni asomo, pero no pierdo la esperanza. Seguiremos informando.