miércoles, enero 25, 2006

Todos tenemos derecho a opinar

Pues vale, yo también voy a opinar: Estoy hasta las narices de oir tanta sandez acumulada. Estoy harta. Harta de levantarme por la mañana y ponerme de mal humor. Harta de sentirme agredida por gente inculta sin dos dedos de frente. Harta de oir tantas mentiras y que nadie diga nada.
Harta de tener que andar como pidiendo perdón.
Hasta las narices de que no se respete ni la ley, ni la opinión, ni los desos de gente de buena voluntad como yo.
Harta de que nadie haga el mínimo esfuerzo por ponerse en mi lugar. Harta de que me hagan sentir mal por hablar otra lengua que resulta que es la mía, es decir mi lengua materna y que lleva hablándose en una nación que también es la mia y que se creó hace más de 1000 años. Harta de no poder hablar de federalismo sin que a alguin le coja un síncope. Harta de que no se entienda que todo es compatible . Harta de que me perdonen la vida. Harta de que no se hable nunca del nacionalismo español.
HARTA.
Y es triste y además me indigna que Rajoy haya sido capaz de decir lo que ha dicho. Aunque, claro está, la derecha siempre ha sido más perversa.