domingo, diciembre 04, 2005

Bárbaros

Hace tiempo que he descubierto que a los europeos del norte, o lo que es lo mismo, en todos los sitios donde el tiempo es un asco, les gusta preguntarte qué tiempo hace aquí.
De los ingleses lo entiendo por su sentido sado-masoquista, pero del resto: suizos, alemanes, daneses y suecos, más bien no.
Cada que vez que hablo con alguno de ellos por télefono, lo primero que hacen es preguntar qué tiempo hace aquí. Pero no se conforman con que digas que hace sol, o no. No, no, quieren detalles: temperatura, si hay nubes, si llovió ayer o lloverá mañana. ¿Viento? ¿Granizo? Un parte, vaya.
Así que, siguiendo los consejos de mi compañera, cada día sacamos más lustre al tema: está claro que siempre hace sol, y una temperatura de 18º C, la lluvia ni la vemos y además nos vamos a pasear cada tarde después del trabajo, a disfrutar del tiempo.
Los únicos que representan al Sur son los griegos; ni falta hace decir que con ellos es otra historia. Ellos, como yo, no preguntan por el tiempo.